Despachos de cobranza: ¿Cómo ejercer tus derechos en caso de que traten mal?

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Si alguna vez has recibido llamadas insistentes o mensajes intimidantes por parte de despachos de cobranza, pero crees que te están tratando mal, puedes ejercer tus derechos y denunciarlos.

Estas empresas tienen la tarea de recuperar pagos atrasados en nombre de bancos, tiendas o compañías de servicios, pero, tienen fama de a veces cruzar la línea de lo legal y lo ético.

¿Qué hacen los despachos de cobranza?

Los despachos de cobranza trabajan como intermediarios entre las instituciones financieras y los deudores, siendo su función es contactar a las personas que tienen adeudos pendientes y buscar el pago, ya sea mediante llamadas telefónicas, mensajes o incluso visitas a domicilio.

En algunos casos, compran directamente la cartera vencida, lo que los motiva a recuperar lo más posible sin importar el costo.

¿Hasta dónde pueden llegar legalmente?

Aunque los despachos están autorizados para comunicarse contigo, tienen límites muy claros, pues no pueden acosarte, amenazarte ni difundir tu información personal.

Tampoco deben dirigirse a personas ajenas al adeudo ni hacer uso de lenguaje ofensivo y, en caso de hacerlo, están incurriendo en una práctica ilegal que puedes y debes denunciar.

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La Profeco te protege: esto es lo que debes saber

La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) tiene la facultad de intervenir cuando un despacho actúa fuera del marco legal, ya que puede sancionar a la empresa comercial que contrató a dicho despacho e incluso aplicar multas.

Si recibes un cobro, tienes derecho a conocer con claridad qué entidad lo solicita y cuánto debes exactamente.

Además, el despacho debe identificarse correctamente y ofrecerte esa información de manera respetuosa y transparente.

Prácticas que los despachos no pueden realizar

Hay varias acciones que están prohibidas por ley, pero que algunos despachos aún realizan para presionar a los deudores. Estas incluyen:

Llamarte fuera del horario permitido (entre las 10:01 p.m. y las 6:59 a.m.)
Contactar a personas ajenas a tu deuda, como familiares, amigos o compañeros de trabajo
Colocar carteles o avisos en tu domicilio o lugar de trabajo
Usar lenguaje ofensivo o amenazante
Enviarte correspondencia que revele públicamente tu adeudo
Fingir ser autoridades o usar documentos que parezcan judiciales
Solicitar pagos directamente sin autorización
Ocultar su número telefónico o mostrarlo como "privado" o "confidencial"

¿Qué puedes hacer si sufres acoso?

Si un despacho de cobranza ha cruzado la línea, tienes varias formas de actuar; primero, puedes contactar directamente a la Profeco para recibir asesoría o presentar una queja. Las opciones son:

Llamar al Teléfono del Consumidor: 55 5568 8722 o 800 468 8722
Escribir al correo: asesoria@profeco.gob.mx
Ingresar tu queja en línea: www.gob.mx/profeco
Acudir a una oficina de Profeco en tu ciudad

Profeco puede orientarte, iniciar un proceso sancionador e incluso proteger tus derechos frente a empresas que abusen de tu situación financiera.

Consulta el Redeco: identifica y denuncia

Otra herramienta clave es el Registro de Despachos de Cobranza (Redeco), operado por la Condusef.

Este registro te permite verificar si un despacho está legalmente constituido, conocer sus datos de contacto reales y, lo más importante, presentar una queja si detectas malas prácticas.

Puedes consultar este registro en el sitio web de la Condusef y también podrás ver si el número desde el que te llaman está registrado o si se trata de una suplantación o intento de fraude.