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¿Qué santo se celebra hoy? Santoral del sábado 31 de mayo de 2025

Justo en el último día del mes, la Santa Sede celebra a este hombre, quien es reconocido por ser devoto de su fe y ayudar a los desamparados

Ingrid Mateos
31/05/25

¿Qué santo se celebra hoy? Santoral del sábado 31 de mayo de 2025

FOTO: ¿Qué santo se celebra hoy? Santoral del sábado 31 de mayo de 2025

El santoral católico de hoy 31 de mayo recuerda a un humilde fraile capuchino que se reconoce  por su obediencia, caridad y entrega total a Dios. 

El portal de la Santa Sede celebra hoy a San Félix de Nicosia, quien a pesar de ser analfabeto, su amor por los más necesitados, lo convirtieron en un ejemplo vivo del Evangelio

Historia de San Félix de Nicosia

Félix de Nicosia, cuyo nombre de nacimiento fue Filippo Giacomo Amoroso, nació en 1715 en la ciudad de Nicosia, en Sicilia, Italia.

Desde muy joven quiso ser fraile capuchino, y aunque era analfabeto y de origen muy humilde, fue aceptado como hermano lego, es decir, un fraile que no accede al sacerdocio y se dedica a trabajos manuales o de servicio en la comunidad.

Antes de ser admitido, pasó siete años insistiendo en ingresar a la orden, tiempo que dedicó al trabajo, la oración y la mortificación, hasta que, finalmente, fue aceptado en 1743 en el convento de Mistreta, y un año después tomó el nombre de Fray Félix de Nicosia.

Pasó casi toda su vida religiosa en su ciudad natal, donde ayudaba al hermano limosnero a pedir donativos. 

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Para esto, recorría las calles diariamente, agradeciendo incluso a quienes no podían darle nada, por lo que se ganó el cariño del pueblo por su sencillez, su carácter amable y su famosa frase: "Que sea por el amor de Dios".

Aunque no sabía leer, memorizaba textos bíblicos y doctrinales que escuchaba en el convento, y enseñaba catecismo a los niños, aunque también trabajó como portero, zapatero y enfermero. 

Según las leyendas católicas, se le atribuyen curaciones milagrosas, especialmente durante una epidemia en 1777 en el pueblo de Cerami. Además, también se hizo popular porque se acercaba a prisioneros y marginados, llevándoles comida y consuelo espiritual.

Murió el 31 de mayo de 1787, a los 78 años, y 101 años después, fue beatificado en 1888 por el Papa León XIII, para después ser  canonizado en 2005 por el Papa Benedicto XVI, quien lo llamó un "doctor en humildad".

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